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Tres manchas de petróleo, que en conjunto sumarían cerca de 1680 galones de crudo, y una que mide 500 metros de ancho, flotan desde el domingo en el Golfo de Morrosquillo.
Dos ya habrían sido controladas por los Guardacostas del Caribe y la empresa Oleoducto Central S.A. (Ocensa), pero una no pudo ser aislada y llegó el martes a las playas de Tolú, Sucre, específicamente al balneario conocido como El Francés, que ha afectado a varios pescadores.
Aunque falta que una comisión de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y de la Corporación Autónoma Regional de Sucre, Carsucre, determine en últimas de qué tamaño de la afectación ambiental en la costa de Sucre; y desde allí comience la investigación para saber los detalles del desastre, desde el mismo domingo iniciaron planes de contingencia.
"El domingo pasado en la noche, durante el cargue de un buque, se presentó un incidente en el puerto de Ocensa. Por las condiciones climáticas hubo un desprendimiento de la manguera y se presentó un vertimiento en el mar", indicó el director de Carsucre, Ricardo Baudin.
Más en específico, el incidente se presentó hacia las 8:45 de la noche cuando un buque adscrito al Oleoducto Central (Ocensa), que a esa hora realizaba el cargue de un millón de barriles de crudo tipo Castilla en el Puerto Marítimo de Coveñas, se le reventó una de las mangueras y esparció cerca de 40 galones de petróleo al mar, que ocasionó una gran mancha que por el movimiento marino se dividió en tres, una de las cuales empezó a moverse dirección sur y las otras dos al norte.
Ocensa responsable del hecho según Carsucre, de inmediato activó su plan de contingencia para el manejo de la emergencia.
Lo más preocupante era, según Baudin, que las dos manchas del norte llegaran a las costas de las zonas de reserva que quedan cercanas a Coveñas y Tolú, como las Islas del Rosario y o el archipiélago de San Bernardo; por lo que las acciones, en principio, se priorizaron para contener el avance del crudo hacia esas zonas coralinas, que habría sido una catástrofe peor.
Sin embargo, la mancha restante, que según Gestión del Riesgo, tendría un amplitud de 500 metros, no pudo ser contenida en su totalidad, por lo que arribó a Tolú, a unos 20 minutos del parque principal, al sitio conocido como El Francés, que al ser un sitio de vacaciones, por estos días no presenta tanto flujo, sí había afectado pescadores de la zona.
"En Tolú se hicieron operativos hasta las 5 de la tarde del martes, para reducir lo más posible el riesgo de esparcimiento de la mancha, pero lamentablemente terminó una parte en las playas de El Francés", indicó Milena García de la Alcaldía de Coveñas.
Vicente Correa, pescador, dijo al diario El Universal que salió a pescar en la mañana y el olor a petróleo es insoportable, "el pescado huele mal y así no se puede vender".
Sin embargo, Ocensa dice todo lo contrario, e informó a las autoridades locales y nacionales que no se ha reportado afectación para las comunidades aledañas "a la zona por el derrame de hidrocarburos". En el mismo sentido, tanto Gestión del Riesgo como Carsucre, dieron un parte de tranquilidad ante el plan de Ocensa y hablaron de una situación "controlada".